Boca, a un paso del título
- Gaspar Roulet
- 23 abr 2018
- 3 Min. de lectura
Boca derrotó a Newell's por 3-1 y estiró la diferencia a seis puntos con respecto a Godoy Cruz. Los goles fueron de Pavón y Wanchope por duplicado. Ahora, el "Xeneize" sueña con gritar campeón la próxima fecha.
El partido era decisivo, Boca no venía dejando una buena imagen y esta era la oportunidad de redimirse ante un rival que se le ha presentado accesible las últimas veces que lo ha enfrentado. Pavón, con hambre de mundial, hizo un partido notable en lo que fue un grito a Sampaoli de que el cordobés tiene mucho para aportar al seleccionado nacional.
En un comienzo tibio, el "Xeneize" dejó avanzar a la "Lepra", que contaba con un elemento a su favor, la ausencia de Wilmar Barrios, reemplazado por Sebastián Pérez. Este último evidenciaba notablemente su falta de ritmo cada vez que el visitante atacaba, ya que no recuperó tantas pelotas como se hubiera esperado de un jugador regular en su posición. Dos minutos duró hasta que lo amonestaron, abriendo la incógnita de si estos son los últimos momentos que compartirá con el plantel.
En medio de esta tibieza, donde ambos se disputaban más el medio que lo que atacaban, Pavón comenzó a emerger. Primero complicó a la defensa rosarina con una de sus típicas corridas por izquierda, gambeteando a dos y mandando un centro que fue directo a las manos de Ibáñez, el arquero visitante.
Pero el cordobés no perdona dos veces y en su segundo intento, dio frutos. Comenzando en un taco fallido de Tévez, Pavón cayó al intentar recibirla mientras era marcado, pero se levantó y aceleró, sacándose de encima a un defensor y eludió a otro para finalmente tirar un centro atrás que "Wanchope" cambió por gol.
Esto le abrió los ojos a Boca, que se dio cuenta de que el intento ofensivo de Newell's tenía como contracara un descuido total de las bandas, sector que tenían que aprovechar. Aquí tomaría un papel importante otro cordobés, "Bebelo" Reynoso, que haciendo una pausa justa en el borde del área, esperó a la proyección de Jara, a quien le metió un pase formidable. Con la pelota controlada, el lateral derecho de Boca envió un centro y nuevamente apareció "Wanchope", para firmar su primer doblete con la casaca azul y oro (aunque anoche fuera amarilla).
Con el partido 2-0 todo parecía que sería un trámite para el "Xeneize", pero no fue así. Otra vez su propia defensa le jugó en contra, Vergini, uno de los jugadores más cuestionados por los hinchas, salió mal, Fabra, que había confiado en la habilidad del central, había abandonado su posición prematuramente, lo que le dió tiempo a Figueroa, que había interceptado el pase de Vergini, para habilitar a Fértoli.
El delantero eludió a otro de los más cuestionados, Rossi, que se estiró antes de tiempo, haciéndole la tarea más sencilla al hombre de la "Lepra". Así, el partido se ponía 2-1 en el final del primer tiempo y lo que supo parecer resuelto se veía ahora comprometido.
En el segundo tiempo la actitud de Boca cambió, salió mucho más agresivo y Tévez apareció en el partido. Por otro lado, Newell's vio como su lateral derecho se iba reemplazado por el juvenil Cacciabue, que poco pudo hacer ante la experiencia de Pavón.
El cordobés aprovecharía el cambio y, tras una asistencia de Reynoso, definiría de manera fulminante con su pierna derecha, ejecutando un disparo imposible de atajar para Ibáñez, que vió como la pelota entraba decretando el 3-1 final.
Con este resultado, Boca tiene la mente puesta ahora en el partido que se viene este miércoles ante Palmeiras, pero sabe que, de no ganar Godoy Cruz el fin de semana, gritará campeón por segundo año consecutivo.
El resumen del partido:
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